Abril 2011
El presente trabajo tiene por objeto platear cómo, el liderazgo, incide en la estructuración de la “toma de decisión y la confianza” en las organizaciones. El planteo central se basa en que el liderazgo, compone dos dimensiones. La primera, promueve un ordenamiento simbólico, basado en el Mito Institucional del Líder. La segunda, vinculada con la puesta en escena de dicho orden, se objetiva por las prácticas de quienes ocupan el rol de líderes. Mis reflexiones se apoyan en un caso denominado “La Maternidad”, en el que participé como consultor externo. La metodología utilizada para la investigación fue cualitativa. Dicho caso presenta una serie de problemáticas que se suscitaron a partir de la comunicación de la mudanza de la Organización a otro edificio. En el trabajo se sostiene que la toma de decisiones por parte del sistema de liderazgo deviene en un tipo de práctica social que, de un lado, es el medio estructural por el que ésta se realiza; y por el otro, origina resultados que se convierten en nuevas prácticas, de allí la recursividad. La toma de decisión que los líderes producen, nunca poseen una relación de total correspondencia entre los fines esperados y la realidad alcanzada. Más cuando la distancia entre ambos aumenta, más allá de ciertos límites, se elevan los montos de ansiedad, pudiendo ser difícil su procesamiento. Dicha situación implica una erosión en la confianza, con la consiguiente complejización del sistema organizacional, por el simple hecho que la confianza en tanto articulador social, se ve afectada. La caída de la confianza que pueden originarse por la toma de decisiones de los líderes, atomizan el orden simbólico que provee el Mito Institucional del Líder, generando ansiedades persecutorias, las que determinan la estructuración de una organización paranoigénica. Se concluye que el liderazgo incide en la estructuración de la toma de decisión y la confianza, y que las mismas aportan al sostenimiento o debilitamiento del orden simbólico propio de la organización, del cual el liderazgo, es uno de sus elementos fundacionales. Dicha dialéctica produce condiciones de subjetivación por medio de las cuales se consolida y produce la recursividad propia de los sistemas sociales.